La consciencia una  al momento de la creación, se diversifico  en veintidós luminarias con una función  y propósito únicos en todo el sistema. Cada una de ellas aporta un elemento energético y de modalidad espiritual que  genera cambios de consciencia que impactan en cascada todos los vehículos del ser, volviéndolo así cada vez más transparente a  influjo de  la luz para permitirles  fluir a través suyo hacia este mundo de manifestación, activando en  practicante sus distintas modalidades que  le conducirán al templo de Adam Kadmon.